¡ESTA ES LA JORNADA COMPLETA DE BOGOTÁ!

254 mil estudiantes ya disfrutan de más tiempos y más aprendizajes en los colegios públicos de la capital, con un currículo integral que les ofrece la oportunidad de elegir lo que quieren aprender. Conozca algunas experiencias de esta apuesta de ciudad que cambia vidas y realidades.

La educación pública de Bogotá se ha transformado gracias a una política educativa que le apuesta a la formación integral, a través de más tiempos y más aprendizajes en los colegios oficiales.

Esta es la Jornada Completa de Bogotá, en la que 254.991 niñas, niños y jóvenes de 113 colegios distritales eligen lo que quieren aprender de acuerdo a sus intereses, a partir de una amplia oferta de centros de interés que les permiten profundizar en nuevos campos del conocimiento en 8 áreas integradoras: Matemáticas, humanidades, Segunda lengua, Educación artística, Deportes, Ciudadanía y Tecnología.

Las historias y los testimonios de estudiantes y maestros son el reflejo vivo de esta transformación de la educación pública de Bogotá que hoy es ejemplo para el país. Conozca la experiencia de 13 centros de interés, estrategia pedagógica que marca la gran diferencia de la Jornada Completa de Bogotá con el resto del país. Las niñas, niños y jóvenes eligen lo que quieren aprender: la escuela pública lo hace posible.

La formación de mejores ciudadanos es una de las grandes apuestas de la Bogotá Humana. La mejor muestra de ello son 180 estudiantes del colegio Delia Zapata Olivella, en la localidad de Suba, que a través del centro de interés ‘Amigos de 4 Patas’ han aprendido el valor de la vida y salvado a cerca de 300 perros, gatos y hasta un burro sin hogar.

Aunque este es el primer colegio del Distrito que implementó un centro de interés enfocado en el cuidado y rescate de animales callejeros, en los colegios oficiales más de 17 mil estudiantes profundizan en sus aprendizajes en ciudadanía, convivencia y comunicación.

80 agrupaciones marciales hacen parte del centro de interés en banda de marcha de la Jornada Completa de Bogotá, bajo la dirección del maestro Gustavo Rosas. Junto a él, un gran equipo de 60 maestros músicos potencia los aprendizajes y desarrollan las habilidades artísticas de niñas, niños y jóvenes de los colegios oficiales. Además de la técnica musical, los estudiantes reciben aprendizajes para el buen vivir.

Gracias a la Jornada Completa de Bogotá, la astronomía indígena también es parte de los aprendizajes que reciben los estudiantes de los colegios públicos. 110 niñas y niños del colegio Porfirio Barba Jacob son protagonistas de este extraordinario estudio del universo, en el que cada clase es una experiencia única y un viaje hacia lo ancestral que los lleva a entender los diferentes fenómenos de la vida y la naturaleza que componen la cosmovisión indígena.

La música sinfónica es ahora una de las preferidas en los colegios públicos. En Bogotá, más de 4 mil estudiantes participan en el centro de interés de banda sinfónica, fortaleciendo su educación artística. “La Jornada Completa nos da todo. A pesar de que no tenemos el dinero, esta jornada nos brinda instrumentos, profesores y lo más importante: conocimientos para la vida”, asegura Sebastián Cano, quien desde hace un año interpreta el violín en el colegio Simón Bolívar.

El Karate se convirtió en un ‘salvavidas’ para los jóvenes de Bogotá, demostrando que la Jornada Completa es una política que cambia vidas y transforma realidades. En el colegio La Estancia – San Isidro Labrador, los estudiantes del centro de interés en esta disciplina descubrieron una opción de vida, con la que han ganado coraje, disciplina y más de 60 medallas. Pero además, en toda Bogotá, ya son 884 estudiantes de 14 instituciones educativas los que disfrutan del aprendizaje de este arte marcial.

Con la creación de un centro de interés especializado en el uso de tabletas digitales, 560 estudiantes de 8 colegios públicos de Bogotá han experimentado una revolución de ‘pequeñas dimensiones’. Por su tamaño, funcionalidad y conectividad, estos dispositivos tienen un inmenso poder para transformar la educación: han hecho posible que los estudiantes pasen de ser consumidores a generadores de sus propios contenidos digitales.

101 aulas de inmersión de segunda lengua ha implementado la Jornada Completa de Bogotá para promover el aprendizaje lúdico y activo de inglés y francés, trascendiendo las clases y pedagogías tradicionales. Más de 34 mil estudiantes se benefician de este espacio, que más que una asignatura, es una ventana para conocer el mundo a través de las experiencias de 740 cooperantes extranjeros que han participado en el programa durante los últimos 3 años.

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El riesgo y la adrenalina son la garantía de estar aprendiendo al extremo, aseguran los participantes del centro de interés de BMX. Son 496 estudiantes que actualmente experimentan la oportunidad de darle un giro de 180° a la educación convencionalpara aprender, más que un deporte sobre bicicleta, responsabilidad, disciplina y constancia.

Cerca de 500 estudiantes de las instituciones educativas oficiales se dejaron contagiar por el ultimate, un deporte que tomó vuelo en la educación pública de la ciudad y en el que el juego limpio, el trabajo en equipo y el respeto son más importantes que ganar un partido. Mientras para algunos el frisbee es sinónimo de paseos familiares o encuentros de amigos, este se convirtió en la actividad favorita de los estudiantes de 8 colegios del Distrito que lo practican gracias a la Jornada Completa de Bogotá.

Dos veces por semana, 727 estudiantes de los colegios distritales toman una clase de adrenalina en altura. Ascendiendo sobre un bloque de 20 metros, descubren que la escalada es un deporte que ofrece otra forma de aprender, en el que hay que utilizar la mente antes que los músculos para llegar a lo más alto.

Hace 44 años, el tchoukball fue declarado como deporte de la paz. Esta práctica también llegó al colegio Técnico Industrial Piloto,  donde 18 estudiantes vinculados al centro de interés aprenden que lo importante no es ganar ni ser campeones, sino contribuir a la construcción de una sociedad más armoniosa.

Sable, florete y espada son los nombres de tres armas, muy familiares para 810 estudiantes de los colegios públicos de la capital. Gracias a esta política educativa practican esgrima como parte de su formación integral. Ellos descubrieron que este deporte olímpico no es exclusivo para una selecta minoría, mientras desarrollan sus habilidades motoras y sus capacidades ciudadanas. “Les damos un arma y saben que no es para agredir a otro, sino para desarrollar un arte”, asegura la docente enlace Gladys Rincón León.

La formación de ciudadanos ambientalmente responsables, es otra de las metas de la Jornada Completa de Bogotá. En la localidad de Usme, la escuela rural La Argentina alberga a 49 pequeños guardianes de la tierra que hicieron de la basura el mejor insumo para crear obras de arte. Uno de los centros de interés enfocado a la reflexión y el cuidado ambiental, que promueve el reciclaje y las manualidades, y una intención pedagógica muy clara: hacer que los niños ocupen sanamente su tiempo libre, desarrollen su motricidad fina y afiancen habilidades como el trabajo en equipo.