#EducaciónEnLaFilbo Estudiantes del Distrito disfrutaron del Taller ‘Narrando la Paz’

Aproximadamente 40 estudiantes de los grados séptimo a once del colegio Prado Veraniego de la localidad de Suba desarrollaron un ejercicio de pedagogía de la memoria a través de la lectura, en el pabellón 5 A de la Feria del Libro. Así transcurrió la actividad.

El libro escogido fue ‘Naturaleza común’, un conjunto de relatos de firmantes del Acuerdo de Paz de 2016, en el que cuentan cuál fue su relación con la naturaleza mientras recorrieron muchas de las regiones más apartadas del país.

En palabras de Miguel Ángel Franco, líder del equipo de pedagogía del Centro de Memoria, Paz y Reconciliación, “el objetivo era alejarnos del típico relato de los horrores de la guerra y acercarnos a otras reflexiones. Afortunadamente tuvimos una buena respuesta de los estudiantes que participaron activamente del taller”.

Con estos espacios pedagógicos la Secretaría de Educación busca fomentar hábitos de lectura para que las y los estudiantes puedan desarrollar sus habilidades críticas, logrando, a su vez, que los jóvenes entendieran los sentidos de la memoria, paz y reconciliación. Así lo explicó Camila Barragán, estudiante de noveno grado.

“Creo que lo más importante fue poder ver más allá, conocer los relatos contados por los propios excombatientes y no solo lo que nos cuentan las noticias. Me gustaron mucho dos historias y lo mejor fue que nos regalaron el libro para poder leerlas todas en casa”, puntualizó.

Durante la actividad, se leyeron en voz alta algunos de los relatos para que los asistentes al taller pudieran conocer el libro y entender algunas de las experiencias de los firmantes de la paz.

“Los estudiantes y las personas que nos acompañaron pudieron hablar con los excombatientes a través de la literatura. Leer en voz alta siempre será placentero porque nos permite conectarnos de una manera distinta con la historia. Deberíamos volver a la lectura colectiva”, agregó Miguel Ángel Franco.

De otro lado, Carlos Flórez, asistente al taller, lo denominó un espacio fascinante que debería ampliarse a las instituciones educativas del Distrito.

“Es muy importante que nuestros jóvenes sean conscientes de las problemáticas del país, que entiendan que hay una nación más allá de Bogotá. Así se formarán ciudadanos más responsables y eso tendrá un impacto muy significativo en la construcción de mejores sociedades”, finalizó.

Para llevarles a nuestros lectores algo de los relatos de los excombatientes, terminamos esta nota con el final de la primera historia del libro, llamada ‘Un puñado de memorias’, que fue escrita por Juan Álvarez:

“Así como los náufragos llevan siglos regresando con una historia por contar, así este grupo de excombatientes tiene para ofrecernos su experiencia vivida allí, en las entrañas diversas de una geografía que, quizás no sea tarde, podemos recorrer como intento de reconciliarnos”.

¡La educación en primer lugar!