5 EXPERIENCIAS ‘AFRO’ EN LOS COLEGIOS PÚBLICOS DE BOGOTÁ

La educación pública de la ciudad se une a la celebración del Día de la Afrocolombianidad, resaltando las experiencias de maestras y maestros que le apuestan al reconocimiento de una cultura diversa, festiva y fundamental en la construcción de una ciudad mejor para todos.

Una ciudad educadora, es aquella que le apuesta a la educación intercultural y que celebra la diversidad en las aulas.

Por esto, en los colegios públicos de Bogotá, maestras y maestros implementan iniciativas que hacen la diferencia para garantizar que el derecho a la educación se transforme en una realidad incluyente e intercultural para más de 3 mil estudiantes afrocolombianos, inscritos actualmente en el sistema educativo del Distrito.

Conozca las experiencias pedagógicas de la educación pública de Bogotá con las que a diario se construye el significado de la afrocolombianidad en la escuela:

1. En el colegio Alfonso López Pumarejo de la localidad de Kennedy, la maestra Carmenza Novoa transforma la inclusión racial a través de Blanca Luz, una muñeca negra que se convirtió en compañera inseparable para niñas y niños y demostró que el amor por el otro no tiene color de piel.

Blanca Luz es una experiencia pedagógica de disciplina, convivencia e inclusión racial, pero, sobre todo, de afecto y, pues gracias a ella los estudiantes replican este amor hacia sus compañeros ‘afro’. A ella se han sumado otros ‘hermanitos’ y cada uno de ellos acompaña un curso de primaria en el colegio.

2. Un colegio público de San Cristóbal construye el significado de la afrocolombianidad alrededor de palenques de hortalizas y plantas medicinales, que buscan acercar a niñas, niños y jóvenes a los saberes ancestrales africanos.

“El palenque en la escuela es un símbolo de resistencia de la cultura afro”, asegura María Stella Escobar, orgullosa maestra afrodescendiente del colegio Altamira, que difunde la enseñanza de la historia negra a todos: niñas y niños, mestizos y afros.

3. Con historias sobre San Basilio de Palenque, música y bailes, la profe Martha Lucía Ramos transmite el legado multicultural de nuestro país a los estudiantes de preescolar del colegio público Alfonso Reyes Echandía.

Si a la profe Martha le preguntan dónde nace el racismo o la discriminación por etnia, su respuesta es clara: en la infancia. Por eso, su proyecto ‘Somos etnias, somos culturas, somos A.R.E.’ busca que, desde la educación inicial, niñas y niños reconozcan la diversidad.

4. A las estudiantes del colegio Entre Nubes Sur Oriental las une ‘la pinta, la raza y el don del sabor’. Como jóvenes afrocolombianas, han encontrado en la salsa ‘choke’, el hip hop y el break dance, las raíces del Pacífico que buscan transmitir sobre cualquier escenario al que llevan sus coreografías.

El baile es una de las estrategias del proyecto ‘Yo soy, yo tengo una historia que contar’, que se desarrolla en el colegio Entre Nubes Sur Oriental desde hace cuatro años con el objetivo de reconocer la diversidad étnica que existe en la comunidad educativa.

5. 120 estudiantes afrocolombianos del colegio San Bernardino participan en el ‘Consejo de Etnias’, una iniciativa que reúne a niñas, niños y jóvenes indígenas, afro y mestizos para dialogar sobre los significados y las culturas de las diferentes etnias que convergen en la localidad de Bosa.

“El objetivo es adaptar un lugar dentro de la escuela para que los estudiantes tengan la posibilidad de reconocerse, reconstruir sus identidades y recuperar lo ancestral de sus familias”, explica Blanca Peralta, coordinadora del colegio San Bernardino.