Fecha de publicación: Jue, 25/05/2017 - 23:01

‘INNOVADORES DIGITALES’, UN PROYECTO PARA EXPLORAR NUEVOS MUNDOS EN LOS COLEGIOS DEL DISTRITO

Con esta iniciativa no sólo se enseñan nuevas tecnologías. También se resignifican vidas. Una apuesta del gobierno de Enrique Peñalosa de ofrecer ambientes de aprendizaje innovadores, en los que las niñas, niños y jóvenes de Bogotá experimentan con realidad virtual y aumentada, programación tangible y video 360.

Nuevas formas de ver y percibir el mundo. De eso se trata ‘Innovadores digitales’: un proyecto del gobierno ‘Bogotá Mejor para Todos’ que beneficia a 1.080 niñas, niños y jóvenes de cuatro colegios oficiales en las jornadas Única y Extendida, y con el que la Secretaría de Educación impulsa el saber crear y el saber digital de los estudiantes.

Sharit Bernal, de 10 años, es una de esas estudiantes que descubre y crea a través de la tecnología y la innovación. En uno de los salones del colegio San Cayetano de Usme, la pequeña dibuja concentrada las cuatro paredes de lo que será la casa de sus sueños.

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Está utilizando ‘SketchUp’, un programa de diseño gráfico y modelado en tres dimensiones que utilizan arquitectos, diseñadores, ingenieros civiles y sus compañeros de quinto de primaria que, esa mañana, se esfuerzan por trazar bien en la pantalla de su computador las medidas de lo que su cabeza imagina.

Mientras los 30 estudiantes le dan rienda suelta a su fantasía, Milton Mahecha, el tallerista de la clase, le pasa a Sharit unas ‘Cardboard’ que no son otra cosa que gafas hechas de cartón donde, al poner frente a ellas un dispositivo móvil, se entra de inmediato al mundo de la realidad virtual.

En cuestión de segundos, las cuatro paredes del salón frente a los ojos de Sharit se transforman en una emocionante montaña rusa que sube y baja por repetitivos bucles de diversión. Al quitarse las gafas, la pequeña de ojos grandes y claros sonríe.

“¿Sabías que esto que acabas de ver, lo vas a poder hacer con la casa que estas dibujando y que luego de terminarla podrás recorrer todo lo que hagas dentro de ella?”, le pregunta Milton a Sharit y ella, sorprendida, mira a su compañera de puesto, se sienta y empieza a dibujar las escaleras de lo que será el segundo piso de su casa.

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Esto es lo que ocurre todos los díasen los colegios Nueva Esperanza y San Cayetano de Usme, Naciones Unidas de Engativá y Tomás Carrasquilla de Barrios Unidos, donde diariamente un grupo, conformado por un coordinador pedagógico, un tallerista y un monitor, enseña a niñas y niños entre los 10 y 16 años componentes de arquitectura, diseño, modelado 3D, ilustración, creación artística, desarrollo de contenido multimedia, robótica, electrónica y narrativa audiovisual.

Así se transforman los ambientes de aprendizaje y las maneras de ver, sentir y percibir el mundo de los estudiantes. La clave: la innovación.

“Todo lo que hacemos en materia de educación debe ser una experiencia significativa para que transforme vidas”, asegura la secretaria de Educación del Distrito, María Victoria Angulo, y es precisamente esto lo que está ocurriendo desde marzo de este año en estos colegios públicos de Bogotá.

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Tal como explica Germán Arturo Cabrera, cabeza de la Dirección de Educación de Preescolar y Básica de esta entidad, el objetivo es fortalecer los procesos pedagógicos de las instituciones educativas distritales de Bogotá, enfocándose en la inmersión de los estudiantes en este nuevo mundo de ciencia y tecnología.

“Queremos incentivar el trabajo colaborativo, el aprender haciendo, la creación y la investigación, alineadas con el plan de estudios de cada institución educativa, en correspondencia con la ruta de mejoramiento de la calidad institucional. Así, el proyecto ‘Innovadores digitales’, desarrollado por medio de la Organización Critertec, busca fortalecer el Proyecto Educativo Institucional (PEI) de cada una de estas instituciones educativas por medio del uso y apropiación de nuevas tecnologías de la educación, para producir un aprendizaje significativo y acercar a los niños a un nuevo mundo”, explica el director.

Tecnologías para transformar vidas

En ‘Innovadores digitales’, la definición del ‘yo’ tiene varias capas. La más íntima, que representa el cuerpo y la mente. La segunda, que representa las relaciones más cercanas como la familia. La tercera, donde se ubican la comunidad, el barrio, el colegio y la gente con la que interactuamos. Y la cuarta, que enmarca la ciudad y el país donde vivimos.

“Cada uno de los grupos que tenemos en los cuatro colegios tomó una de estas capas y desde ahí están creando. Lo que ellos se imaginan, es la mejor versión de cada capa”, explica el tallerista David Pinzón.  Y agrega que esto les permite a los estudiantes “visualizar cómo se imaginan en un futuro, y esta idea es poderosa porque les estamos dando las herramientas para que creen y hagan realidad la vida que se imaginan y quieren”. En pocas palabras, es una manera de empoderar a los niños de Bogotá.

De esta forma, niñas, niños y jóvenes comprenden que los espacios de innovación tecnológica son espacios para el aprendizaje, entendidos como escenarios para la vida que promueven el desarrollo del ser humano, facilitan los saberes esenciales, inspiran, posibilitan la investigación y la innovación para vivir mejor.

Y, además, son lugares que permiten a la comunidad pensar en la escuela como escenario para el encuentro y reconocimiento, propicio para el diálogo, la reconciliación y la paz y la elaboración de ese ‘yo’ que se conforma mediante su tejido social, que son las capas.

“Yo no sabía que se podía hacer todo esto con sólo una tableta. Quiero saber más de esto, cambió mi mundo”, comenta Harold Hernández, estudiante de 14 años del colegio Nueva Esperanza, quien sostiene este dispositivo donde se puede visualizar la imagen en realidad aumentada del cuerpo humano.

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Ni por un segundo deja de mirar la imagen y explora detenidamente todas las opciones que esa nueva realidad le ofrece, “es que así cualquiera aprende y es más fácil de lo que pensé”, asegura este joven mientras relata cómo su profesor de química estaba igual de emocionado a ellos, cuando vio la tabla periódica en realidad aumentada.

Lo mismo le ocurrió a la rectora del colegio San Cayetano, Luz Angélica Cubillos, cuando entró a una de las clases de ‘Innovadores Digitales’ y decidió convertirse en una alumna más.

“Algo muy chévere de este espacio innovador es que los docentes también pueden entrar al aula y aprender a usar estas nuevas herramientas. Esto ha sido muy interesante porque además de darnos una horizontalidad de aprendizaje entre estudiantes y docentes, nos ha permitido articular aún más lo que ocurre en estas clases, con nuestras otras clases y materias y eso es muy valioso”, asegura esta rectora que, como la pequeña Sharit, está diseñando la casa de sus sueños.

Estas cuatro experiencias se reunirán en un solo lugar para trabajar juntos en una idea aún más grande: crear la Bogotá que ellos se imaginan, porque todos los que participan en esta experiencia están convencidos de que, si hay infinidad de mundos posibles que se pueden crear con estas nuevas tecnologías, también podemos encontrar nuevas respuestas para transformar la realidad en la que hoy vivimos.

Saber crear para saber crecer

El alcalde Enrique Peñalosa ha sido claro: en Bogotá no hay nada más importante que las niñas, niños y jóvenes. Por eso, su administración trabaja arduamente hoy para ofrecer a la infancia y la juventud de la ciudad una educación de calidad con reales oportunidades de aprendizajes para la vida y trayectorias completas, en igualdad en las condiciones de acceso y permanencia para todos.

A propósito del fortalecimiento de los proyectos institucionales y del aprendizaje significativo, la Secretaría de Educación del Distrito incluyó es su actual apuesta por mejorar la calidad educativa de la ciudad, la estrategia ‘Uso del tiempo escolar’.

Allí se incluyen las jornadas Única y Extendida, en las que se desarrollan proyectos como el de ‘Innovadores Digitales’, con los que se busca que las niñas, niños y jóvenes fortalezcan uno o más de los siguientes saberes: investigar, comunicar, cuidarse, vivir y compartir en comunidad, crear, aprender y saber digital.

Para este último, es indispensable que la escuela contemple dentro de su currículo el acceso apropiado a la tecnología, adopción correcta de los usos y formas de aprender y enseñar, adaptación a los ambientes digitales y nuevos desarrollos, apropiación de metodologías para el trabajo individual y colaborativo en red e innovación educativa para la gestión del conocimiento. Todas condiciones que hoy garantiza el gobierno distrital, como lo enfatiza la secretaria de Educación del Distrito, María Victoria Angulo.

“Aumentar el tiempo escolar de los estudiantes del sistema educativo oficial en ambientes de aprendizaje innovadores, permitirá fortalecer en ellos competencias cognitivas, físico-creativas, comunicativas, ciudadanas y socioemocionales necesarias para que alcancen todo su potencial. Se trata de que nuestras niñas, niños y jóvenes aprendan más y mejor”, concluye la secretaria.

Por Paula Andrea Fuentes

Fotos Andrés Valenzuela

Porque una ciudad educadora es una Bogotá mejor para todos


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