SanaMente, estrategia de prevención de consumo de alcohol, benefició a más de 10 mil estudiantes

Más de 10 mil estudiantes del sistema educativo de la ciudad y sus familias han participado de un trabajo de prevención respecto al consumo de alcohol, que es la puerta de entrada a otro tipo de consumos y adicciones.

Este 19 de noviembre a las 9 de la mañana en Maloka, se realizará el evento de clausura del programa de prevención del consumo temprano de alcohol “SanaMente”, cuyo objetivo está orientado a  aumentar la percepción y las influencias normativas en estudiantes entre 9 y 12 años, de modo que se aplace o disminuya su contacto con el alcohol como sustancia precursora y facilitadora del proceso adictivo.

Esta estrategia fue liderada por la Secretaría de Educación del Distrito, en el marco del Programa Integral para el Mejoramiento de los Entornos Escolares.

“SanaMente fue diseñado por la Fundación Colectivo Aquí y Ahora para abordar de manera integral el problema del consumo temprano de alcohol con los estudiantes y sus familias, rectores, docentes y orientadores. Esto con el propósito de fortalecer factores protectores y disminuir los riesgos frente al consumo de alcohol en menores de edad porque además es bien sabido que esto es la puerta de entrada a otro tipo de consumos. Es decir, entendemos al alcohol como sustancia precursora y facilitadora del proceso adictivo.”, explicó Andrés Trujillo, director de Relaciones con el Sector Educativo Privado.

En las 30 instituciones educativas distritales (IED) de la ciudad de Bogotá en las que se implementó el programa durante 2019 fueron 10.285 los estudiantes y sus familias que hicieron parte de esta estrategia de prevención. Se trata de niños y niñas de los grados quinto y sexto, con los que se logró concientizar los distintos peligros que implica el consumo temprano de alcohol.

La prevención se abordó desde tres frentes: uno con los estudiantes, con quienes se advirtió de las implicaciones para el organismo y la salud en general que tiene el consumo temprano de alcohol; otro con los padres de familia, con quienes se apuntó a desarrollar un cambio cultural frente al consumo de alcohol en niños, niñas y adolescentes y el significado de la protección familiar; y el tercero con los directivos docentes, docentes y orientadores, quienes se formaron en la metodología del programa.

Durante el evento de clausura se hará la presentación de los resultados de la evaluación del programa en el que se socializarán sus efectos en los estudiantes frente a las variables percepción del riesgo e influencias normativas y se realizará la entrega de los certificados a los docentes y orientadores que se formaron como facilitadores de esta estrategia preventiva.

A través de este programa, Bogotá avanza en el fortalecimiento de sus capacidades para la prevención del consumo de sustancias psicoactivas, como de uno de los fenómenos que más afecta negativamente la calidad de los entornos escolares y la convivencia.