Colegios Eduardo Santos y Anglo Colombiano, aliados por la excelencia educativa

La distancia entre Usaquén y Los Mártires no ha sido un impedimento para que estas instituciones educativas intercambien aprendizajes desde hace más de cuatro años.

Una relación de colaboración y trabajo en equipo, eso es lo que han construido los colegios Anglo Colombiano y Eduardo Santos a través de los encuentros que durante más de cuatro años vienen dándose entre estos dos colegios de la capital, una iniciativa a la que se ha sumado la Secretaría de Educación del Distrito.

No es para menos. Estas instituciones educativas buscan, en conjunto, una educación oficial y privada de calidad que responda a las necesidades de niños y jóvenes mediante la identificación de fortalezas, potencialidades y asuntos por mejorar en el día a día.

Así lo explica Andrés Trujillo, director de Relaciones con el Sector Educativo Privado de la Secretaría de Educación: “Con estos ejercicios de encuentro entre colegios públicos y privados de Bogotá buscamos desarrollar valores democráticos en la ciudad que les permitan a los participantes entender el mundo desde los ojos del otro y descubrir que, como habitantes del mismo territorio, es mucho más lo que nos une que lo que nos divide”.

De acuerdo con María Constanza Henao Cortés, rectora del colegio Eduardo Santos de la localidad Los Mártires, esta complicidad surgió hace más de cuatro años y se ha ido consolidando gracias al intercambio de experiencias y conocimientos.

“Estamos soñando en grande. El Anglo Colombiano tiene como fortalezas el bilingüismo y la enseñanza de música, mientras que el Eduardo Santos cuenta con un énfasis en diseño mecatrónico. Alrededor de esto, establecemos actividades al iniciar el año y trabajamos en espacios en los que todos los estudiantes se reconozcan, aprendan y transfieran sus aprendizajes a contextos y realidades diversas”, explica la rectora.

Uno de estos espacios tuvo lugar en el Eduardo Santos. Se trató de una clase de inglés de estudiantes para estudiantes. Allí, un grupo de jóvenes de 9.º del Anglo Colombiano fue recibido con alegría por niños de 5.º del colegio anfitrión.

Posteriormente, el refuerzo de algunas palabras al saludar y presentarse y una canción para aprender las partes del cuerpo en la lengua extranjera formaron parte de la jornada lúdica.

Isabella Moreno, estudiante de grado 9.º de la institución visitante, expresó su emoción por compartir sus conocimientos: “Quisimos reforzar el aprendizaje en inglés a través de actividades dinámicas y divertidas. Así que preparamos canciones y juegos. Me siento feliz por estar acá, sé que estamos generando impacto en otros niños, aunque sea de una manera mínima”.

Antonia Herrera, estudiante de 5.º que participó en la actividad, aseguró que fue una clase muy divertida en la que conocieron otros niños, varios de ellos nativos de Inglaterra que se encontraban en Colombia realizando un intercambio cultural.

Pero el aprendizaje de inglés no es el único punto que estos colegios ponen sobre la mesa. Según explica Alan Coyne, un docente irlandés de Política, Historia y Economía del Anglo Colombiano, también se han generado intercambios deportivos y culturales tanto entre estudiantes como entre docentes.

La clave para que esta alianza se mantenga a pesar de los años y la distancia, como lo afirma el profesor Coyne, “es una comunicación abierta para entender las necesidades del otro, ayudarnos y complementarnos”.

Porque una ciudad educadora es una Bogotá mejor para todos.